Introducción

A lo largo de mis más de quince años de experiencia en el mundo de la consultoría y la formación, ya sea desarrollando nuevos productos, mejorando los existentes o creando nuevas líneas de negocio en distintas multinacionales en las que he tenido el placer de trabajar como consultor, he ido cobrando conciencia de que todos tenemos un gran potencial creativo.

En la totalidad de los programas de formación en los que he participado, los asistentes tenían la percepción de que ellos no eran creativos. Me decían cosas como: «La creatividad es un don: o se tiene o no se tiene», «Yo no soy creativo». Y cosas por el estilo.

Recuerdo un alumno que se quejaba de que él no era creativo, de que no tenía ideas, de que su día a día era tan rutinario que ya no se le ocurría nada nuevo.

Le propuse el siguiente reto: si tuvieses 150.000 €, ¿en qué te los gastarías? Me respondió que en comprarse una casa. Yo le dije que acababa de tener una idea que seguro que, si la comparaba, resultaría mejor o peor que otras (viajar por el mundo, montar una gran fiesta, comprar un deportivo o adquirir una licencia de taxi y empezar a generar dinero). Si te fijas, para él las otras ideas eran mejores o peores que la que había tenido; para otras personas sería de otra manera. Pero la conclusión era que tenía ideas.

Ideas tenemos, pero muchas veces es cuestión de querer tenerlas, no de justificarse. Para muchos, la creatividad empieza en la actitud. ¿Quiero tener ideas o no?

Conforme se desarrollaba el programa, se empezaban a dar cuenta de que todos éramos capaces de concebir ideas; la clave reside en saber activar nuestro potencial creativo. Lo tenemos dentro, pero nos cuesta sacarlo.

¿Alguna vez te has preguntado por qué no te viene a la mente ninguna idea? ¿Te has visto en alguna situación que necesitabas solucionar, un reto o problema, y has sentido que te bloqueabas, que no sabías por dónde empezar? ¿Tienes la sensación de que, cuando te pones a solucionar algo, no estás llegando a ningún sitio? ¿Intentas cambiar las cosas, pero no sabes por dónde empezar? ¿Te propones retos y no sabes cómo encararlos para encontrar una solución?

Estas preguntas nos las hemos planteado todos en algún momento de nuestra vida. Pues bien, lo que pretendo con este libro es darte las claves para que sepas actuar y seas capaz dar respuesta a estas preguntas.

En el transcurso de nuestro día a día nos enfrentamos a distintos retos que tenemos que resolver. Esos retos nos dan que pensar y tenemos que buscar alguna solución. Unos son fáciles y los vadeamos sin problemas; otros, sin embargo, solo somos capaces de solucionarlos con gran esfuerzo, y puede, incluso, que lleguemos a darnos por vencidos.

Cuando no encontramos la solución, poco a poco se apodera de nosotros la sensación de que nos falta la idea y de que nos hemos quedado bloqueados.

Por ejemplo, en los cursos que imparto siempre planteo la siguiente pregunta:«¿En qué situaciones cotidianas nos faltan ideas?». A continuación te detallo algunas de las respuestas más comunes:

• A la hora de preparar una fiesta original.
• Al pensar en un nuevo plan para el fin de semana.
• Al pensar en un disfraz para una fiesta.
• Al ir a regalar algo sorprendente a mi pareja.
• Al plantearme qué hacerles de cenar a mis hijos.
• Al ir a organizar una mudanza.
• Al abrir un nuevo negocio en mi ciudad o barrio.

Desde un punto de vista empresarial, situaciones como:

• Crear una nueva línea de negocio.
• Lanzar nuevos productos.
• Reducir costes.
• Aumentar ingresos en el departamento comercial.

Algunas de estas situaciones y otras similares son muy comunes en nuestra vida diaria y a lo mejor te has identificado con ellas. En este libro espero darte las claves para que sepas cómo superar ese primer bloqueo y tener ideas fácilmente que te ayuden a solventar cualquier problema.

Lo importante es que sepas enfrentarte a los retos, sean cuales sean, y que tengas la seguridad de que puedes solucionarlos.

Para muchos, la creatividad es una característica de las personas, sinónimo de una capacidad extraordinaria de resolución de problemas. Podríamos poner miles de ejemplos de lo más variopinto de ideas innovadoras, de distintas obras de arte, de personas creativas; podríamos mencionar centenares de nombres de artistas, haber visto toda la publicidad del mundo, asistir a todo tipo de conferencias sobre innovación, y, con todo, no llegar a ser nunca creativos, no sentirnos nunca auténticos creadores. Ello se debe a que desconocemos los principios y los métodos fundamentales en los que se basa el pensamiento lateral y a través de los cuales funciona y opera, es decir, ignoramos cómo se debe ejercitar y entrenar a fin de tenerlo activo y que nos dé resultados cuando recurrimos a él.

Muchas personas, cuando se enfrentan a un reto o a problemas, empiezan a sentirse bloqueadas. Ese bloqueo, que frena la actividad del pensamiento lateral, se debe muchas veces a alguna de las siguientes causas:

• La incapacidad de cambiar las respuestas estereotipadas.
• La incapacidad de adaptar las formas de percepción.
• La excesiva familiaridad con un asunto.
• Los bloqueos sociales o culturales.
• Los bloqueos emocionales.

A la hora de generar ideas, lo que hay que conocer no es en qué sitio buscar una en concreto, sino cómo entrenar el pensamiento lateral, cuál es el método por el que se producen todas las ideas, de qué modo hacerse con los principios que están presentes en el origen de todas las ideas. Este libro pretende darte a conocer ese método, ayudarte a que lo practiques y lo conviertas en un hábito diario.

Mi intención es transmitirte una nueva dimensión de la creatividad para que, a través de la participación y la práctica, vayas desarrollando tu talento creativo, para que puedas entrenar y cobrar conciencia de los pasos que deben darse a la hora de conseguir la fluidez de ideas ante cualquier reto o problema.

Al finalizar el libro, sabrás cómo poner en práctica cualquier desarrollo innovador, te sentirás capaz de solucionar cualquier barrera y estarás en condiciones de recurrir a tu pensamiento lateral para generar nuevas ideas.

Este es un libro en el que se te da a conocer de una manera muy sencilla y amena los trucos que puedes utilizar para que tú mismo sepas cómo ser más creativo, y ello de una manera práctica, cercana a tu día a día y, sobre todo, útil tanto para tu vida personal como profesional.

Vas a conocer las claves para potenciar tu creatividad y poder aplicarla en todo aquello que consideres oportuno. Vas a saber jugar con la creatividad, entrenarla para posteriormente utilizarla. Cuando termine el libro, vas a considerarte una persona más creativa, que sabes y puedes tener más ideas.

El objetivo principal del libro que tienes entre manos consiste en potenciar el talento creativo que toda persona tiene a través del buen uso del pensamiento lateral. Todo va a girar alrededor de un método (el método de las cinco rutinas) que al principio tienes que interiorizar y después saber poner en práctica.

Para utilizar correctamente el pensamiento lateral, se deben dar una serie de pasos que te voy a indicar de un modo muy práctico. Todo vas a ensayarlo con ejercicios y actividades para ir progresando y activando tu pensamiento lateral al mismo tiempo que te diviertes y lees el libro.

Empezamos por reflexionar sobre nuestra manera de resolver los problemas, sobre cómo actuamos ante los bloqueos, si nos quedamos parados o buscamos una solución. Vas a alcanzar una comprensión práctica de los pilares de la creatividad a fin de conseguir ideas innovadoras que solucionen los retos de tu día a día.

A continuación, veremos cuáles son las características de las personas que potencian su creatividad en su día a día, así como qué podemos hacer para explotar la creatividad que llevamos dentro, comenzando por identificar distintas actividades que van a ayudarnos a utilizar nuestro pensamiento lateral.

En esta parte del libro vamos a centrarnos en ejercitar lo que denomino «el método de las cinco rutinas» de toda persona creativa: cómo trabajarlas y qué pasos tienen que darse para que estas rutinas te ayuden a tener ideas.

Una vez que te identificas con las rutinas y empiezas a activarlas en tu vida diaria, estás en disposición de dar el siguiente paso, que no es otro que conocerte a ti mismo, tanto en tu «momento tierra» (tu pensamiento lateral está ausente o es escaso) como en tu «momento aire» (tu pensamiento lateral se pone en marcha y fluye). La clave es que seas capaz de identificar tu momento tierra y sepas despertar al pensamiento lateral que llevas dentro para así instalarte en el momento aire (rico en líneas de pensamiento e ideas).

Una vez que sepas despertar el pensamiento lateral, pasamos a provocarlo para ponerlo en marcha. Aprenderás cómo se provoca el pensamiento lateral para que te dé nuevas ideas y aporte soluciones a los retos a los que te enfrentas. La provocación la haces tú, y voy a enseñarte a hacerla cuando tú quieras.

Al finalizar el libro, sabrás qué tienes que hacer, paso a paso, a fin de utilizar tu pensamiento lateral y recurrir a él a la hora de buscar ideas y soluciones nuevas e innovadoras para cualquier reto que te propongas.

Vas a aprender a entrenar tu pensamiento lateral, a través de distintas actividades y ejercicios, para que, cuando quieras utilizarlo, te sea más fácil encontrar nuevas ideas y soluciones.

Finalmente, conocerás los principales pasos que hay que dar para registrar la idea y empezar el desarrollo que te ayudará a empezar a transformarla en innovación.

Para muchos, la creatividad es un don, algo innato. En el mundo de las ideas hay personas a las que sí se considera creativas. Si te fijas en ti mismo, seguro que reparas en que también has tenido ideas, sobre todo de pequeño. Mira en tu entorno a los niños pequeños y evalúa si son creativos.

Lo que nos ocurre es que, con el paso del tiempo, vamos perdiendo la facilidad que tenemos para alumbrar ideas. En este libro pretendo que recuperes esa capacidad que tenías cuando eras niño.

Voy a hacerlo de una manera sencilla, considerando que puede tratarse como una habilidad. Piensa en cualquier deporte (por ejemplo, el atletismo); puede ser que tengas o no capacidades innatas para practicarlo. Imagínate ahora que quieres practicarlo. Cuando empiezas a ponerte en forma, debes dedicar mucho tiempo a entrenar y entrenar, hasta que ves que empiezas a dominar esa habilidad, ese deporte, es decir, hasta que tienes soltura para defenderte en él.

En este libro voy a contarte cómo puedes desarrollar tu talento creativo, cómo puedes entrenarlo como si fuese una más de tus habilidades, esa gran habilidad que se le pide a cualquier persona hoy día, tanto en el trabajo como en su vida personal.

Vas a introducirte en el mundo de las ideas, en cómo hacer crecer el talento creativo como si fuese una habilidad, como si estuvieses practicando cualquier deporte.

Imagínate que vas a un gimnasio a empezar a practicar deporte, pues quieres prepararte para correr una carrera popular de diez kilómetros. Lo primero que tienes que hacer es conocerte a ti mismo, saber un poco cómo tienes de entrenados ciertos grupos musculares que son necesarios para la práctica de ese deporte. En el caso de la creatividad ocurre lo mismo. Al principio de este libro te enfrentarás a retos y comprobarás la facilidad que tienes para resolverlos.

El siguiente paso es comprender qué entrenamiento, con sus distintas rutinas, es necesario llevar a la práctica para mejorar en ese deporte. Una vez que conoces las rutinas que tienes que trabajar y qué ejercicios se asocian a cada una, te creas tus propias rutinas de entrenamiento para poner tu cuerpo a punto. Esa dinámica es muy parecida a lo que vas a descubrir en este libro, si bien aquí asociada al desarrollo de la creatividad como habilidad.

Para desarrollar el talento creativo –que es el deporte que queremos practicar–, debes realizar una serie de ejercicios; estos van a permitirte entrenar el talento creativo, pues son lo que le ayuda a estar en forma.

Descubrirás, a través de rutinas de entrenamiento, cómo se oxigena el talento creativo, que posee una enorme capacidad de generar ideas.

Ahora vuelve a ponerte en la situación de que quieres prepararte para correr esa carrera popular de diez kilómetros de la que hablábamos. Como hemos dicho, lo primero es conocerte a ti mismo y saber cómo estás de forma, hasta qué punto estás preparado. Después, debes entrenar, saber qué rutinas de ejercicios debes practicar para prepararte bien. Por último, llega la hora de enfrentarte al reto: la carrera.

Si has entrenado bien, acudirás a la carrera con garantías de éxito. No te preocupa ganarla: ese no es el reto; el reto es correrla y terminarla en un cierto margen de tiempo.

Pues bien, eso mismo es lo que vas a aprender en este libro, solo que trasladado al terreno de la creatividad considerada como una habilidad, como un deporte que quieres practicar.

Lo primero es conocer ese deporte y ver en qué nivel estás; en otras palabras, conocer la creatividad y enfrentarte a determinadas situaciones que te permitan ver hasta qué punto tienes entrenado tu talento creativo. Después, has de crearte rutinas de entrenamiento que te permitan poner al día dicho talento creativo. Por último, debes enfrentarte a retos con el talento creativo entrenado.

Prepárate, pues, para entrar en el mundo de la creatividad. Prepárate para entrenarla y practicarla. Seguro que, cuando termines el libro, te habrás creado rutinas que ya nunca vas a abandonar.

Habrás conseguido poner en forma tu talento creativo y sabrás cómo mantenerlo en ese estado.

¿Te atreves? Pues empecemos…

Bienvenido al gimnasio de tu talento creativo.